viernes, 14 de noviembre de 2014

Ventajas e inconvenientes del portafolio

En mi práctica docente diaria y en mi reciente experiencia como madre de una niña que acaba de empezar 1º de primaria, cada vez me resulta más urgente que nos planteemos un cambio. Los niños españoles pasan muchas horas en el colegio y otras tantas en casa haciendo deberes o estudiando, sin embargo nuestros resultados en las evaluaciones internacionales son cada vez más bajos ¡¿Cómo es posible?!

Es fundamental empezar a cambiar nuestras dinámicas docentes, aprender a enseñar de otra manera. El e-portafolio puede resultar una forma diferente de enseñar y evaluar a nuestros alumnos que, a mi parecer, tiene muchas ventajas:

  • Fomentar la autonomía: Es algo en lo que las metodologías han fracasado por completo. Los alumnos actuales solo conocen un aprendizaje muy dirigido, guiado y con unos ritmos rígidos, no les permitimos auto-regularse. El hecho de permitir que el alumno busque sus propias evidencias, requiere un alto grado de autonomía.
  • Motivación. El portafolio permite visualizar los trabajos realizados por los alumnos. Empleando las herramientas digitales actuales se pueden conseguir resultados muy vistosos de forma fácil y sencilla. Creo que el empleo de herramientas digitales puede resultar motivador para muchos alumnos.
  • Capacidad para seleccionar fuentes de información. Tenemos, gracias a internet, una ventana abierta a millones de fuentes de información. Dotar a nuestros alumnos de herramientas para seleccionar fuentes de información fiables es fundamental para su futuro.
  • Atención a la diversidad. Eligiendo las evidencias de forma adecuada, se pueden crear portafolios que se adapten al nivel y a las necesidades de cada alumno.
  • Utilización de diferentes programas y aplicaciones TIC. Nuestros alumnos han nacido en la era tecnológica. Controlan a la perfección sus móviles y las redes sociales, pero es necesario mostrarles otros programas a parte de éstos. Ellos aprenden a manejarlos muy rápido, casi de forma instintiva, pero hay que ponerlos a su alcance para que lleguen a manejarlos.
  • El fin no justifica los medios. En los últimos tiempos, en mi experiencia, parece que toda la vida escolar está orientado a los exámenes, son el fin y lo más importante. Los alumnos casi no preguntan dudas del temario, preguntan si algo entrará o no en el examen o como se preguntaría otra cosa en el examen. A mí, personalmente, me resulta muy poco acertada esta concepción de la educación, hace poco leí que los centros educativos se estaban convirtiendo en centros evaluadores más que en centros docentes o pedagógicos. Creo que es fundamental que transmitamos a nuestros alumnos el placer de aprender, la satisfacción un trabajo bien hecho. El portafolio es una ventana abierta a ese trabajo que hace el alumno, que puede admirar y compartir con los demás, una forma de darse cuenta de que no hace falta hacer un examen para aprender, ¡el examen no es lo más importante!

En mi opinión pesa mucho más lo positivo que lo negativo, sin embargo, se nos pueden plantear algunos problemas a la hora de utilizar otras metodologías:
  • Desacuerdo con los compañeros. Estos días, he comentado con algunos de mis compañeros mi intención de empezar a aplicar el portafolio en mis clases. Algunos de ellos, me han desanimado a hacerlo. Supongo que si la mayoría de ellos me hubieran manifestado su desacuerdo, probablemente me hubiera desanimado a empezar a utilizar portafolios en mi práctica docente
  • Disconformidad de los padres. Los niños y sus padres están acostumbrados a una forma de enseñar. Muchas veces se sienten incómodos cuando se hacen las cosas de otra manera porque consideran que “baja el nivel”. Probablemente, después de su utilización se darían cuenta de que no solo en nivel no baja, si no que los alumnos son más autónomos y están más motivados para aprender.
  • Falta de medios informáticos. Para poder utilizar el e-portafolio, es necesario disponer en el centro de suficientes medios informáticos para ello. Esto no se da en todos los centros. En el centro en el que trabajo, por ejemplo, tenemos un ordenador en cada aula y una sala de ordenadores para toda la secundaria. Esto podría complicar seriamente el poder implantar esta nueva metodología.

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